jueves, 17 de septiembre de 2015

¡ Estamos de celebración múltiple !

¡Hola a todos!

   Hoy es un día muy especial, estamos de celebración: aniversario de mis padres ¡43 años casados! y ¡¡¡8 años que nuestro hijo llegó a casa por primera vez!!!. Supongo que alguien estará diciendo “Hombre, lo de celebrar el aniversario lo entiendo… pero ¿celebrar que el niño llega a casa por primera vez?”, parece raro si, pero…. ¡todo tiene una explicación!. En este caso intentaré resumirlo lo más posible porque si me dejase llevar por la experiencia en sí y todo lo que aconteció alrededor de la misma ¡tendría para escribir un libro!, de todos modos quiero haceros participes de la felicidad que tengo en este día.


   Nuestro campeón nació antes de tiempo, muuuuuuucho antes de tiempo, fue un gran prematuro o prematuro extremo, para ser exactos nació en la semana 25+3 días de gestación (para que no tengáis que echar números os diré que le faltaban 4 días para cumplir 6 meses de embarazo). A que os preguntáis ¿pero cómo era? y yo os digo: ¡muy pequeñito!, os pongo unas similitudes: bien como el hermanito de la Nenuco o como una botella de agua de 1,5 litros, resumiendo: 35,5cm y 820gramos….. ¡haceros idea!...

Manita de mi bebe en la mia con 15 dias de nacido
   No fue como cualquier parto normal: das a luz y te vas a casa a las 48 horas, no, no, no….a mí me dieron el alta a las 48 horas y ¡a casita con mi marido!, el peque se quedó solo (bueno, solo no estaba, había más bebes y las enfermeras de la UCI neonatal que los cuidaban, y un montón de cables, y vías, y más cables….) casi todos metidos en sus barriguitas de cristal llamadas incubadoras y que hacían lo más parecido a la barriga de mamá.
Nuestro campeón con mes y medio

    Mientras iban pasando los días, nos conformábamos con poder entrar a verlo en las visitas diarias, 3 veces al día (no tuve la suerte de poder hacer el método canguro, ni de estar con él las 24 horas), así que las visitas que eran de 30 minutos se nos pasaban como si fuesen de un segundo….pero segundo a segundo, minuto a minuto, hora a hora, fueron pasando los días (algún sustillo que otro nos dio) hasta llegar al día 83 en que nos lo trajimos a casa, uno de los días más felices de nuestra vida; por eso hoy es un día para celebrar ¡¡¡¡y a lo grande!!!!.

   No se a que ojos llegará esta entrada, en cualquier caso animar a todos aquellos padres que estén pasando por la situación de tener un bebé antes de tiempo y decirles que luchen ¡si nosotros nos empeñamos salen adelante! ¡querer es poder!. Y lo mas importante, dar las gracias: a todo el mundo que estuvo a nuestro lado (abuelos, tios, primos...), a los que por lo que fuese no se atrevieron a preguntar, a los que preguntaban por morbo; pero las gracias mas enormes son para una persona muy especial, que siempre está a mi lado en las buenas y en las malas (siempre sabiendo buscarle este punto de humor que hace que las preocupaciones y los dolores se olviden por un instante) y que espero que lo lea y que estoy segura que alguna lagrimilla asomará en sus ojos y que aunque a veces no se lo diga ¡¡¡¡¡ TE QUIERO MUCHISIMO !!!! y al protagonista de esta entrada (que lo leerá cuando sea mayor) ¡¡¡ Siempre serás nuestro roscollito, nuestro Pecho Lobo!!!.


Un saludo y que tengáis un día estupendo.

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