Ahora que los peques han
vuelto al cole es la hora de pensar todos los días en que les vamos a poner de
pinchito para el recreo, en nuestro colegio nos han dado unas pautas de ejemplo
que han llamado "recreos saludables" (que para que os sirva os pondré otro
día). Uno de los días les permiten llevar bollería casera y yo pensando
encontré una opción para uno de esos días y además ahora que los días van a
empezar a enfriar esta receta nos servirá para desayunos, meriendas y para
cualquier momento del día, son los Rosquillos de Mamá.
Ingredientes (24 rosquillas
aproximadamente, depende del tamaño):
- 6 cucharadas (sino os digo nada serán soperas) de azúcar
- 6 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharada de agua
- 2 cucharaditas de levadura Royal
- 2 huevos
- Harina de trigo
- Azúcar glas para decorar
Elaboración:
En una fuente honda ponemos los 2 huevos, el
azúcar, el aceite de oliva, el agua y la levadura. Lo batimos todo bien hasta
que quede una mezcla homogénea.
A continuación empezamos a
echar la harina y vamos mezclando poco a poco hasta que consigamos una masa que
se pueda trabajar pero que quede un poco blandita.
Preparamos una sartén con
aceite y lo vamos poniendo a calentar (para freír podemos usar si queremos
aceite de girasol).
Nos enharinamos las manos para
poder trabajar la masa, cogemos un poquito la estiramos en forma de rollito y
lo cerramos haciendo la forma del rosquillo. Yo preparo unos cuantos sobre la
encimera previamente enharinada también para evitar que se peguen a la misma.
Cuando el aceite está caliente, los vamos echando, cuando veamos que empiezan a
dorarse les damos la vuelta y los sacamos a un plato, donde iremos colocando
los rosquillos y les echamos por encima un poquito de azúcar glas para decorar.
Como llevan levadura y van a
crecer, os aconsejo que vayáis echando de a poquito a freír porque si no corréis
el riesgo de que al crecer no os quepan en la sartén, asique vale más ir echándolos
al aceite sobrando espacio en la sartén.
Si queréis para darles un
toque distinto, a la hora de preparar la masa si os gusta podéis añadir un
poquito de anís dulce o ralladura de limón, yo no los echo porque me gustan así
sin más.
Esta receta se puede preparar
para hacer más cantidad de rosquillos, tan solo tenéis que ir aumentando las
cantidades proporcionalmente. Una vez que están fríos los podéis guardar en una
lata para galletas y os duraran unos cuantos días como recién hechos.
Espero que os animéis a
hacerlos, son ideales para un desayuno o una merienda con chocolate a la taza recién
hecho o con un café con leche o con lo que más os guste.
Si los hacéis me gustaría que
me dijeseis si os han gustado. Hasta pronto
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por venir.